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La alfabetización adulta
La esperanza de vida al nacer.
El índice de desarrollo humano (IDH) se prepara desde 1990. Mide los logros medios en cuanto al desarrollo humano básico en un índice compuesto simple y único, produciendo una ordenación de países. Dicho índíce se compone de cuatro indicadores:
1. Esperanza de vida al nacer.
2. Tasa de alfabetización adulta.
3. Tasa de matriculación combinada.
4. Ingreso per cápita ajustado en PPA en dólares.
Estudiado el Ingreso per Cápita ajustado en PPA, para acabar este estudio, vamos a valorar cómo se han desarrollado los países objeto del estudio en dos de los tres aspectos restantes de que se compone este Indice:
la esperanza de vida al nacer y
la tasa de alfabetización adulta.
De los cuadros expuestos (de Hong Kong no hay datos fiables, por controvertidos), lo primero que se observa es que desde 1990 los países más libres han experimentado un incremento medio de 2’8 años de esperanza de vida al nacer.
Ya de por sí el índice es alto (aunque este estudio observa datos desde 1990, podemos aventurar que dicho crecimiento ha sido elevado después de la Segunda Guerra Mundial, hacia 1945).
De hecho, estos países tienen hoy una esperanza de vida de 77’9 años (media ponderada de las tasas para hombres y mujeres) y se espera que hacia 2015 alrededor de 10 países conozcan la esperanza de 80 años.
El único país de los 20 que se muestra rezagado es Estonia (con una esperanza menor en 5 años en el pasado y en el futuro). Algún dia, no en este trabajo, estudiaremos porqué.
Los 8 países más intervenidos económicamente del mundo gozan de una esperanza de vida, por término medio, 15 años menor que la de los países libres.
Destacar los desastrosos efectos de la guerra Iran-Irak, que llegó a una esperanza de vida al nacer tercermundista (52’3 años) y dos importantes recesiones, como son las de Corea del Norte (posiblemente por la insuficiencia de su sistema sanitario, de 1990 a 2005 ha perdido 7’6 años de esperanza de vida) y Zimbabue (los conflictos armados y el SIDA deben ser la causa de una esperanza de 33’1 años para 2005, menor todavía para 2015 con 31’8 años).
Comentar que España goza de unas perspectivas mejores que las europeas (aquí siempre hemos dicho que en nuestro país se vive mejor), pero dos factores clave de estos datos se encuentran en la dieta mediterránea y en un buen sistema sanitario.
Zimbaue está camino de la desaparición. En recesión económica desde 1998 (su PIB real ha descendido un 4’3% durante los últimos 9 años), con una tasa de paro que se aproxima al 60%, está sufirendo un descalabro mayor en el índice de esperanza de vida al nacer, cuyas previsiones para 2015 se estiman en 31’8 años. De 157 países, ocupa el puesto 154 en el Indice de Libertad Económica. Sufrió un empeoramiento sustancial en el índice en el año 2001.
Campesina zimbabuense.
Conflicto armado en Zimbabue.
La guerra Irán-Irak (1980-1988) produjo semejante destrozo a la economía iraní que este país, junto a Nigeria, tenía en 1990 la peor esperanza de vida al nacer de los 8 países más intervenidos del mundo.
Conclusión: Los países más libres económicamente tienen una calidad de vida mucho mejor que los reprimidos. Esta calidad les ha llevado a esperanzas de vida que en Europa rondarán los 80 años (algunos, como Suecia, superarán los 81’1 años de edad). Los países con régimenes cerrados tienen una esperanza menor, por término medio, en 15 años.
Niño llamado a filas durante la guerra Irán-Irak.